El espacio agua de Cal Ratés, diseñado y producido por la Escuela del agua, ha abierto por primera vez al público, y no a un público cualquiera: a trabajadores y familiares de Agua de Rigat.
Después de una entusiasta bienvenida los 40 participantes se han dividido en 5 grupos y han recorrido toda la exposicion, interactuando con los diferentes módulos: los pozos de la captación que les han dejado un poco mojados, el cloro del tratamiento que les ha hecho dialogar y preguntar, las tuberías de la distribucion que les han hecho pensar, los diferentes consumos de agua tanto virtual como directa que los han sorprendido y, finalmente, han conocido los residuos que llegan a una depuradora aunque no nos lo queramos creer.
"El Carme Capellades es nuestro acuífero", "Si reciclásemos bien las depuradoras tendrían menos trabajo", "¡Guau!, cómo limpia el carbón activo!" son las primeras conclusiones de los más pequeños de la jornada. Los adultos han destacado el respeto hacia un espacio patrimonial muy querido en Igualada y la interactividad y didáctica de la museografía.